Por fin ha llegado la primavera: el sol, los días al aire libre, los árboles en flor. "Árboles en flor", que junto con la primavera, traen consigo alergias al polen.

Alergias primaverales

La primavera es la época en la que las personas alérgicas deben empezar a tomar precauciones no solo cuando están al aire libre sino también en casa, ya que los pólenes también pueden entrar en el hogar.

Qué son los pólenes y cómo se forman

Entre abril y mayo, el periodo de alergia alcanza su máxima intensidad cuando ciertas plantas están en flor.

La alergia respiratoria se produce por la sensibilización del individuo al polen. La mayoría de la población italiana es alérgica a las hierbas o compuestos.

La contaminación ambiental ayuda a aumentar la intensidad de la conciencia.

¿Pero qué son los pólenes?

Los pólenes son las células reproductoras masculinas de las plantas, que se liberan al aire durante el período de floración para fertilizar otras plantas de la misma especie.

Los alérgenos presentes en los pólenes desencadenan una reacción inflamatoria que provoca síntomas como hinchazón, congestión nasal y ojos rojos.

Sin embargo, la reacción alérgica se produce cuando hay una cierta cantidad de polen en el aire, por lo tanto hasta que se supere un determinado umbral de concentración de polen, que obviamente varía según los factores climáticos, por ejemplo, un clima seco aumenta la producción de polen , y el viento provoca una mayor dispersión del polen en el aire.

¿Cuáles son los síntomas de la alergia al polen?

Los síntomas de la rinitis alérgica son muy similares a los de la gripe estacional.

La mayoría de las personas experimentan congestión de las vías respiratorias, enrojecimiento de los ojos, malestar general, cansancio, dolor de cabeza, etc.

Poder distinguir las alergias del resfriado común es importante para llevar a cabo el tratamiento adecuado. Si los síntomas se prolongan, es recomendable consultar a un médico, ya que la alergia es estacional. Un alergólogo podrá identificar las plantas a las que somos alérgicos mediante pruebas cutáneas, o mediante análisis de sangre.

Muchas personas experimentan un profundo malestar en este periodo, ya que los síntomas de la alergia suelen ser tan intensos que no les permiten afrontar la vida diaria con serenidad.